Este
trabajo se realizó en marzo del 2006 y se actualizó
a fines de febrero del 2010.
Por
Elena Luz González Bazán especial para
Villa Crespo Digital
22
de marzo del 2017
Este
informe trata sobre el entubamiento en la Cuenca del
Maldonado.
La misma consiste en dos túneles de 6,90 metros
de diámetro de 5 y 10 kilómetros de
longitud. La proyección de ambos túneles
es para que parte del agua que drena por el Maldonado
sean recogidos por estos. El túnel de 5 kilómetros
estará listo en tres años, el más
largo en cuatro.
ESTE
ES EL PRIMER INFORME
Haciendo
un poco de historia desde el punto de vista técnico,
referenciado al proceso de trabajo que se hizo desde
el gobierno porteño, con referencia a la propuesta
de obras de infraestructura.
Que se hizo en la Cuenca del Maldonado
Este trabajo fue realizado cuando, aún, Jorge
Telerman estaba a cargo del gobierno porteño.
Se ha procedido a entabicar interiormente el actual
entubamiento del Arroyo Maldonado, o sea, reforzar
la estructura existente, desde la avenida Donato Álvarez
hasta la avenida Santa Fe, para llegar hasta la avenida
Libertador. Dicho entabicamiento es de hormigón
armado que transforma el conducto en canales que ordenan
el escurrimiento.
Por otro lado, dicha obra de entabicamiento responde,
según las autoridades municipales, a optimizar
la estructura actual del entubamiento realizado hace
siete décadas y construir dos conductos o canales
aliviadores que permitirán mitigar los anegamientos
a lo largo de la actual avenida Juan B. Justo por
donde pasa el arroyo Maldonado entubado.
Pero con referencia a estos canales aliviadores no
hay coincidencias de algunos sectores con dicha obra.
La misma consiste en dos túneles de 6,90 metros
de diámetro de 5 y 10 kilómetros de
longitud. La proyección de ambos túneles
es para que parte del agua que drena por el Maldonado
sean recogidos por estos. El túnel de 5 kilómetros
estará listo en tres años, el más
largo en cuatro.
Pero aquí está el problema central Roberto
Feletti - Secretario de Infraestructura del Gobierno
de la Ciudad de Buenos Aires, sostuvo que: "No
puedo prometer que no habrá más inundaciones,
pero sí es seguro que con esta obra se podrá
hacer frente a una mayor recurrencia de lluvias fuertes
que se dio en los últimos años".
Por otro lado, el desplazado Jefe de Gobierno porteño,
Aníbal Ibarra, aseguraba que "las obras
para readecuar la red de desagües pluviales del
Maldonado, en las que invertiremos un total de 190
millones de dólares, quintuplicarán
el actual nivel de protección. Una vez finalizadas
las obras, el millón de habitantes que vive
en la cuenca del arroyo tendrán una protección
mayor e integral ante los temporales y las tormentas
excepcionales".
El 11 de abril del 2005, Aníbal Ibarra se reunió
con el representante del Banco Mundial, Alieto Guadagni
y ahí le explicó como se utilizarían
los 130 millones de dólares que la entidad
crediticia le prestará a la Ciudad para el
Programa de Gestión del Riego Hídrico
cuyo destino principal es la Cuenca del Arroyo Maldonado,
en esa reunión estaba presente Marta Albamonte,
al frente de Hacienda y Finanzas de la Ciudad.
La obra sale casi 200 millones de dólares y
las críticas y resquemores son varios, la esencial
es la manifiesta incapacidad de los reservorios anunciados
para evitar las inundaciones.
El arquitecto Luís Alberto Costa* sostiene
que no se conoce que se hayan realizado la evaluación
de obras alternativas para dar solución al
problema de las inundaciones en la Ciudad de Buenos
Aires y, tomando el plan de reservorios sostiene que:
¨consiste básicamente en la construcción
de 415.000 metros cúbicos de espacios subterráneos
destinados a alojar los excedentes de agua de lluvia
que actualmente superan la capacidad de las redes
pluviales. Para ello se realizarán grandes
tanques subterráneos, que por motivo de la
escasez de espacio disponible llegarían a tener
una profundidad promedio de 25 metros, o sea al equivalente
a un edificio de 8 pisos, pero enterrado y construido
de cordón a cordón, a poca distancia
de los cimientos y de los subsuelos de los edificios
de cada lugar¨
Por tal motivo plantea que es una muestra de improvisación,
ya que, algunos reservorios y siempre tomando los
datos del portal del gobierno porteño, tendrían
que tener más de 100 metros de profundidad
y que para solucionar el problema habría que
construir 86 reservorios.
Para no entrar en un proceso de elaboración
técnica que complejiza el problema, decimos
que de acuerdo a las elaboraciones y base geométricas
y cálculo matemático se sostiene en
este otro informe, que con los reservorios anunciados
para la cuenca del Arroyo Maldonado, en lugar de inundarse
360 hectáreas, que fue el desastre del 24 de
enero del 2001, se inundarían 310 y en lugar
de tener un promedio de altura de las aguas de 58
centímetros, sería de 47 centímetros.
Como conclusión dicho trabajo sostiene que
el sistema de reservorios fue descartado durante 1988
y 1989, gobierno de Alfonsín, por los informes
del INCYTH antes citados, que en tal sentido hicieran
la Secretaría de Recursos Hídricos de
la Nación conjuntamente con la Municipalidad
de la ciudad, cuyo Intendente era por entonces el
Dr. Facundo Suárez Lastra. Fue entonces cuando
se realizaron estudios de alternativas de solución
de las inundaciones en la cuenca del arroyo Maldonado,
a saber:
1- la posibilidad de construir reservorios,
2- la posibilidad de construir un Aliviador convencional,
y
3- la posibilidad de realizar un Aliviador no convencional
(ubicado debajo del conducto principal de dicho arroyo.
Por otro lado sostiene que la utilización de
formas convencionales que han sido descartadas por
el gobierno porteño, no sólo serían
más económicas, sino más plausibles.
¨El costo de realizar reservorios, supera ampliamente
al de la realización de conductos tradicionales.
Si tomamos como ejemplo el anunciado para La Boca,
hemos consultado a distintos profesionales del campo
de la construcción, y las respuestas recibidas
indican que la construcción de ese reservorio
puede llegar a costar unos $ 3.500.000, mientras que
la construcción de un conducto pluvial tradicional
nuevo, con salida a la Dársena Sur por la Avenida
Aristóbulo del Valle, sólo puede costar
alrededor de $ 1.400.000, y la reparación de
los conductos existentes en Ministro Brin, costaría
solamente alrededor de $ 300.000, lo que confirma
las estimaciones de los vecinos¨.
14
de marzo del 2006. Actualizado: 25/02/2010 14:54:41
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